¿Te encanta el pulpo? Esta receta de Goya es para ti.
Ingredientes
Instrucciones
Ensalada
- Cocine el pulpo: haga hervir una olla con abundante agua. Sumerja todo el pulpo en el agua hirviendo. Hágalo hervir nuevamente y déjelo cocinar por 30 minutos. Apague la hornilla, cúbralo con una tapa que se ajuste bien y déjelo reposar aparte por 10 minutos. Escurra el pulpo y transfiéralo a un baño de agua helada, para detener la cocción. Escúrralo y déjelo aparte.
- Rebane el pulpo con un cuchillo o una tijera. Separe la cabeza de la base de los tentáculos, y deséchela. Separe los tentáculos de la base y déjelos aparte. Rebane la base en pedazos de ¼ de pulgada de grosor y déjelos a un lado. Corte y deseche todo exceso gomoso o grasoso en los tentáculos. Si lo prefiere, quítele a estos las ventosas. Rebane los tentáculos en pedazos de ¼ de pulgada de espesor y déjelos a un lado.
- Prepare la ensalada: en un recipiente de cristal, combine el aceite vegetal con el aceite de oliva, el vinagre, el jugo de limón, el ajo, el pique, el adobo, la pimienta y el orégano. Mézclelo bien y déjelo aparte. En otro recipiente, combine la cebolla con los pimientos rojos, las aceitunas, las alcaparras y el pulpo rebanado. Vierta encima la mezcla del aceite y revuélvalo todo, para que los ingredientes se mezclen bien. Deje la ensalada marinar en el refrigerador de un día para otro. Sáquela del refrigerador y sírvala fría.
Pique
- Corte los ajíes caballero por la mitad a lo largo, para que las semillas estén expuestas durante la fermentación. Eche los ajíes dentro de un frasco o botella de vidrio, de 16 oz., que pueda sellarse herméticamente con tapa o corcho, una vez terminado el proceso. Agregue el culantro, el ajo y la cáscara de piña.
- Con un embudo, eche en el frasco la sal, el azúcar, el vinagre, los aceites vegetal y de oliva, y tápelo bien. Agítelo y déjelo fermentar en un lugar fresco, por al menos una semana. El pique no requiere refrigeración. Tenga presente que el ajo puede cambiar de color; el contacto con el vinagre y otros ingredientes ácidos genera una reacción química que hace que los dientes de ajo se vuelvan azules, pero ello no afecta su sabor ni su condición de comestible.
Adobo
- Eche todos los ingredientes en un recipiente y mézclelos. Conserve el adobo en un frasco o una bolsa que cierre herméticamente, guárdelo en la alacena.